jorgema

Hoy escribí en el Facebook de un amigo que murió, hoy cumpliría años.  Es interesante como pasa el tiempo, como transcurren los días y segundos, como en un instante estas en el cine viendo una película y disfrutandola con tu amigo, no importante lo que piensen los que están a tu alrededor… estas allí gritándole a la pantalla, poniéndote de pie porque algo no fue de tu agrado en la película o simplemente te quedas viendo hacia la pantalla como si tu cerebro hubiese sido devorado por zombis; volteas y ves que alguien esta haciendo lo mismo que tu y sonríes porque es tu amigo… pero en un parpadeo estas escribiendo en su muro de Facebook, él ya no se encuentra, y lo sabes; sabes que no leerá, que no le dará like porque le agrado lo que le escribiste por su cumpleaños, no te llamara para agradecerte que te tomaras el tiempo para escribir y decearle los mejores deseos en este día… no, nada de eso sucederá… pero sigues escribiendo, esperando que donde quiera que este, lea, sienta, perciba l

Un joven se encuentra sentado en un parque. El clima es incierto y solitario; hace algo de frío y el viento sopla suave mente. Él lee un libro y escucha música como si nada importara a su alrededor. Hace una pausa en su viaje literario, levanta su mirada y allí, frente a él, esté ella: «la mujer más hermosa que han visto sus ojos.» Una amiga, su mejor amiga, la cual es dueña de sus suspiros, de sus pensamientos y hasta de sus sueños más surreales. Él, al verla, no simplemente la ve, él la observa, la estudia y se rinde delante de su hermosura. Observa detenidamente su rostro, ve sus ojos y sus labios, y se pierde en su dulce mirada. En ese instante, su lucha comienza; una batalla sin cuartel da inicio entre lo que quiere decir y lo que dice en realidad. No puede evitar que esos sentimientos invadan su ser por completo. Ellos tienen la fuerza de detener el latir de su débil corazón, hacen colapsar su respiración e inmutan sus movimientos. Haciendo visible lo que es un secreto. H

Existe una ley universal trascendental que he aprendido con los años, y es “que cada decisión y acción que tomas, no solo te afecta a ti mismo sino a todos lo que te rodean” y es como un espiral expansiva. Todo lo que haces tiene una consecuencia inevitable, puedes sufrir por tu consecuencia o puedes disfrutar de ella; y sin temor a equivocarme las consecuencias mas dolorosas son aquellas que involucran inevitablemente a las personas que amas. Pero existen consecuencias mas lejanas, de las cuales no logramos visualizar que tan lejos llegan tan lejos … hoy vi un video, que me confirmo este pensamiento y que este se aplica a todas mis áreas de mi vida. Después de que veas el siguiente video de Chris Jordan , solo pregúntate ¿qué cosas haces que están afectando a los que te rodeas y no te has dado cuenta? Y si no te puedes responder tu solo esta pregunta, creo que es momento de que dejes que alguien mas abra tus ojos y te diga lo que el ve de ti; y si al hacer esto de das cuanta

Los truenos y relámpagos en el horizonte, se escucha como la lluvia se acerca e inunda con mística sublime todo a su alrededor. Gota por gota se hace presente y trae con ella esa paz y creatividad que me hacen sentir vivo, como si fuera parte de ella y de todo… amo escuchar, ver y sentir la lluvia.

Las palabras no mueren ni envejecen, las palabras tienen vida y se transformar al uniese a la voz de quien las pronuncia. Cada palabra viaja desde el alma y traspasa el corazón al ser dichas con gracia y verdad. Las letras y oraciones toman forma de la nada, caminan y vuelan junto con el viento, llegan y se van al sostener el aliento. Y al quedar en la mente de aquel que las escucha y las lleva a la acción, evolucionan como la misma vida lo hace día tras día. Las palabras viajan por el espacio-tiempo, se fugan de un pasado distante como si fuesen escritas o dichas en un presente continuo. Llegando a este instante no tan lejano de esta vida inmediata, rozando nuestra mente y estremeciendo nuestra piel, en un este presente que se respira con exaltación y euforia. Se transportan y mutan, llevándonos a un futuro, el cual sólo percibimos por el conjunto de frases y letras que otros junto con nosotros pronunciamos, únicamente para no dejar morir la fe y la esperanza en nosotros mismos.