Un saludo, un inicio, una puerta que se abre y que deja salir todos los sentimientos por ti. Eso, eso es lo que haré mientras escribo, y mientras tu lees esta carta de amor. No quiero reprimir nada, no quiero guardarme nada, y si por alguna razón, no logro decirlo todo, es porque no todo lo que quiero decirte, se dice con palabras; porque también mis labios quieren decir algunas cosas en medio de nuestros silencios y pausas románticas. Hoy la puerta de mi corazón, se abre ante ti, de una forma que es casi divina. Te quiero, te quiero y lo único que deseo es que entiendas que no me importa esta distancia entre nosotros, no me importa que el mundo entero este confabulando en contra de lo que sentimos y vivimos en nuestra alma y corazón. Porque la distancia, la lejanía y la ausencia que este destino esta colocando frente a nuestras vidas, no se compara con este amor que siento por ti; y se, con cada fibra de mi ser, que tu amor hacia mi, es igual de inmenso e inimaginable. Amor, amor